¡Claro! Es un honor compartir información sobre la Novena de Jesús Nazareno en el Santuario de las Angustias. Esta devoción cristiana es un acto de profunda convicción y entrega hacia la misericordia de nuestro Señor Jesucristo, especialmente en relación a su sagrada pasión. Permíteme proporcionarte detalles sobre este evento y su significado:
- ¿Qué es la Novena de Jesús Nazareno? La novena al Jesús Nazareno es una serie de nueve días consecutivos de oración y reflexión. Durante este tiempo, los devotos meditan sobre nueve momentos clave de la pasión de Jesús, como el beso de Judas, la coronación de espinas, la sentencia de muerte y el encuentro con su Santísima Madre. Cada día se dedica a uno de estos momentos, y las plegarias se ofrecen con devoción ante la imagen de Jesús Nazareno.
- Oración Preparatoria para Todos los Días: Comenzamos con la señal de la santa cruz y el acto de contricción. Luego, invocamos la siguiente oración:“Bendito seas, Señor, por tu infinita bondad. Me postro ante ti para pedir perdón y misericordia. Imploro que atiendas mis súplicas por las necesidades que me afligen. Bajo tu amparo y entregado a ti en cuerpo y alma, amorosísimo Jesucristo. Amén.”
- Día 7: El Séptimo Día de la Novena: “La Generosidad” En este día, recordamos cómo Jesús, estando en el Huerto de los Olivos, se postró de rodillas para orar y ofrecer al eterno Padre sus dolores. La vista de las afrentas y la muerte próxima era tan horrible que sudó sangre. En este momento, podemos hacer nuestras peticiones y confiar en la voluntad del Santísimo Padre.“Amado Jesús Nazareno, que estando en el huerto de los olivos, te postraste de rodillas para orar y ofrecer al eterno Padre tus dolores. Por tu sagrada pasión y muerte, te pido (hacer la petición). Que sea la voluntad del Santísimo Padre, oh Jesús mío. Amén.”Continuaremos meditando y rezando tres Padrenuestros, Avemarías y Glorias cada día hasta el noveno día de la novena.
La Semana Santa está a las puertas, y este tiempo de reflexión y devoción nos prepara para celebrar la pasión, muerte y resurrección de nuestro Señor. Que esta Novena de Jesús Nazareno nos guíe hacia el perdón, la consolación y la luz en los momentos de oscuridad. 🙏🕊️
MEDITACIÓN
Dada por Pilatos sentencia de muerte contra Jesús, los judíos se apresuraron a ponerla en ejecución. Visten de nuevo a Jesús con su túnica, cargan sobre sus hombros una pesada cruz, y le obligan a caminar así por las calles de Jerusalén. La turba corre tras de Jesús, ansiosa de llenarle de insultos. Iba el Salvador tan fatigado, que varias veces cayó en tierra, y temiendo los soldados que desfalleciese en el camino, obligaron al Cirineo a que le ayudara hasta el Calvario.
Hacer, Jesús mío, que Yo sea vuestro cirineo, llevando gustoso la cruz que me queráis enviar.
Medítese, pídase la gracia que se desea conseguir y récense tres Padrenuestros, Avemarías y Glorias. Terminar con la oración final de todos los días.
Oraciones
ORACIÓN FINAL PARA TODOS LOS DÍAS
¡Oh, dulce y amado Padre mío, Jesús Nazareno! Al considerar vuestro amor y la bondad con que me habéis acogido en este día, un grito de gratitud se escapa de mis labios y el recuerdo de vuestras misericordias embarga mi alma. Por ganar mi amor bajasteis a la tierra y sufristeis toda clase de penas y trabajos y muerte de cruz. Por mí también, llegando al colmo de todas las bondades, os quedasteis en el Sacramento del altar, queriendo ser nuestro manjar, consuelo y perpetuo compañero. ¿Qué más? Por nuestro amor os presentáis en esa Imagen coronada de espinas, atado con duros cordeles y vestido con hábito de humildad y de paciencia. ¡Gracias, Señor, por todo!, y a fin de corresponder a vuestros favores, os pido la gracia de cumplir siempre vuestra ley, imitar vuestras virtudes y vivir y morir en vuestro amor. Amén.
ORACIÓN PREPARATORIA PARA TODOS LOS DÍAS
¡Oh, Señor y Dios mío! Animado por vuestra infinita bondad y por los continuos favores que otorgáis a los que imploran delante de vuestra Imagen, misericordia y perdón, a Vos acudo, oh Padre mío, Jesús Nazareno, para ofreceros mis humildes obsequios y presentaros las necesidades de mi pobre alma. Confieso que os he ofendido con grandes faltas, que he repetido sin cesar; pero ya arrepentido, las detesto de veras y propongo ayudado de nuestra gracia enmendarme en lo venidero. Movido, pues, de estos sentimientos, os ruego, ¡oh mi buen Jesús!, que, por los dolores de vuestra Pasión, atendáis las súplicas que os dirijo en esta novena, si son de vuestro agrado y de provecho para mi alma. Amén.
Otros enlaces de interes: